A pesar de ya he escrito sobre el agua del grifo, he creído conveniente volver a investigar y actualizar al máximo todo lo referente a algo tan importante para nuestras vidas. Un tema que considero delicado y complicado, además de que se trata de un recurso cada vez menos apreciado y valorado pero, queramos o no, es tan necesario, imprescindible y fundamental para todo Ser Vivo y para la Tierra. Sin Agua de calidad no hay Vida de calidad.
Adelanto que es un artículo muy extenso por lo que a los que no quieran, no puedan o no les apetezca leerlo entero, les recomiendo que lean lo que está en negrita y/o en color ya que aún así obtendrán mucha información.
Os deseo una grata lectura con todo mi cariño.
AGUA DE ÓSMOSIS INVERSA
Gracias a que mi post ‘Agua del grifo: No apta para la Salud’ fuera publicado en el periódico Última Hora de Menorca, tuve una llamada de Marcos Arroyo, distribuidor de aparatos de ósmosis inversa, que me felicitó por el artículo y se ofreció a venir a casa a analizar mi agua y a adentrarme un poco más en el mundo ‘acuático’. Así que vayamos al grano.
– Quedamos una tarde y empezamos directamente analizando el residuo seco: ‘Se define como residuo total, o también llamado residuo seco, a la suma de materiales homogéneos en suspensión y disueltos en una muestra. En otras palabras, las sustancias que quedan después de evaporarse el agua. Esto es lo que determina el grado de mineralización. Mineralización muy débil: cuando el residuo seco es igual o inferior a 50 mg/l. Mineralización débil u oligometálicas: residuo seco entre 50-500 mg/l. Mineralización fuerte: residuo seco mayor que 1500 mg/l. Las aguas altamente mineralizadas con elevado residuo son peor aceptadas para bebidas, comunican sabor al agua y pueden producir irritación gastrointestinal en usos domésticos y algunos usos industriales específicos.’ [Read more…]